Nuestra gente
Motivado por la noticia de que "Ángel Matos radica medida para expropiar y demoler el antiguo Hotel Normandie", Luis Alberto Ruel, amante del arte (y fascinado por el Hotel Normandie, su arte y su historia desde hace años), se movió rápidamente, consiguió una pintura similar a la de sus paredes y, sin perder tiempo, subió a pintar su preciada joya.
En una publicación en la madrugada del 17 de marzo de 2021, Luis escribió:
Lo que para muchos es un estorbo, para Luis Alberto, de 27 años y vecino de la 4ta Ext. de Villa Carolina, es una preciada joya que debe conservarse y restaurarse.
La noticia de su posible demolición, troncharía por completo las posibilidades de lograr una de sus metas, pues Luis sueña con algún día tener el dinero suficiente para comprar la estructura y devolverle los momentos de gloria que algún día tuvo, pues a sus ojos, la sigue teniendo.
"¡Ya quisiera yo tener el capital para hacerlo una joya otra vez, pero tristemente soy un pobre más, que sueña en grande! Pero al menos aporté e hice algo que nadie haría: ¡arriesgar su vida por el amor al arte y cultura de su pueblo!"
De seguro muchos dirán: "¡ahora que lo quieren demoler, es que hace algo para llamar la atención!", pero no es así: desde el 2018 (cuando le conocí), él me habló de su amor por este lugar y lo que significa para él. Mostraré algunos detalles que te ayudarán a entender su molestia y frustración...
Desde niño, Luis Alberto tiene profundas inclinaciones por diversos tipos de arte, entre ellas, la música, las artes culinarias, la decoración, la fotografía y otras; y -como ya dije- vive fascinado por el Hotel Normandie y su historia, desde que supo de él.
Actualmente, nuestro amigo Luis trabaja como Retén de la Policía Municipal de Carolina y Camionero Transportista para Caribex. En su tiempo libre, alegra su corazón rescatando y restaurando muebles y otras cosas que para muchos son basura, haciendo de ellas verdaderas obras de arte.
O creándolas desde cero...
También trabajó para el Hotel Gallery Inn en el Viejo San Juan, restaurando sus lámparas.
Luis ha llevado su admirable talento musical a lugares como el Auxilio Mutuo, el Hotel El San Juan en Isla Verde, el Caribe Hilton, el Intercontinental, al Hotel Conquistador, al Wyndham Río Mar Beach Resort y a Lights & More en la Ave. Roosevelt, entre otros.
¿Por qué te muestro todo esto?
Es que hay que conocer un poco más de él para entenderlo...
Con este pequeño resumen, quizá ahora puedas entender mejor el por qué de su arriesgada hazaña. Solo el tiempo dirá si sus esfuerzos rindieron los frutos que él y otros amantes del arte desearon, pero -sea cual sea el final de esta historia- en su corazón y en la historia quedará que un joven de 27 años, movido por su pasión por el arte (pasión y conocimientos que evidentemente muchos no tienen) subió a lo más alto de este edificio para rescatarle de manos destructoras que nunca conocieron su real valor.
Todo esto fue hecho en un día, por una sola persona:
Como podrás imaginar, tras largas horas pintando, la pintura se acabó...
Luis escribe: "¡Faltan materiales para terminarlo! Necesito crear un grupo grande para evitar que en el Senado aprueben su demolición. Espero que llegue lejos y se una mucha gente para pintarlo bien y defender al Normandie y el resto de nuestro patrimonio! Es hora de hacer algo y llevar un mensaje claro."
Si de alguna manera te inspira esta historia y quieres ayudar a Luis a cumplir su sueño, puedes escribirle aquí o enviarle tu aportación por ATH Móvil al 787-216-3168. Créeme, que estará más que agradecido.
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